Observé a Sergio una vez observando un segundero digital en el ordenador. De repente empezó a decir "te, ato, inco, sei"...ESTÁ DICIENDO LOS NÚMEROS!!, le dije a Herminia.
Unas semanas más tarde tocaba revisión en Madrid y me puse a tocarle los números de un almanaque que tenía mi padre en la cocina con números grandes, DIJO OTRA VEZ DEL 3 AL 8 (el ocho lo pronunciaba aha, pero los demás se le entendían muy bien). Durante esa semana conseguí que dijera del 1 al 8, y después del 1 al 12.
Al llegar de vuelta a casa usé otro almanaque con números grandes. Aprendió hasta el 20. Además hacía un ritual muy gracioso. Le encanta que le aplaudan y estaba toda la familia en casa porque eran vacaciones de Navidad.
Sergio cogía dos sillas, las ponía delante del almanaque, cogía a su hermana de la mano, la ponía a su lado y traía al resto de la familia, y nos ponía alrededor. Se subía a la silla al lado de su hermana y empezaba a contar. Todos le aplaudíamos al final. LO PASAMOS PIPA. Después cogió el tranquillo y decía sólo "TETE" refiriéndose a veinte para que aplaudiéramos desde el principio.
Cuando la familia se volvió a sus respectivas casas en distintos sitios del mundo, Sergio ya no quiso contar más de esa manera. Ahora cuenta a ratos, cuando le da, pero no todos seguidos como antes.
Les dejo este video de esos momentos. ES SUPERDIVERTIDO.
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